La moda en Sex and the City: Carrie Bradshaw sigue aquí
La moda en Sex and the City se mantiene como faro del vestir de esta época.
Hace 13 años salió el último capítulo de la serie, pero el estilo se mantuvo en clave atemporal.
Carrie Bradshaw fue el personaje ficticio que dio cuerpo a las imágenes digitales logradas por una estética bella -mucho antes de que las redes sociales marcaran la pauta -.
En seis temporadas se desarrolló la idea de la democratización de la moda: mezclar piezas de lujo con las de bajo costo y de feria americana, maximizar el look con accesorios, potenciar la silueta con una prenda estelar, la mirada se direccionó con zapatos lindos y las carteras. Todo acompañó la actitud de una mujer que se vestía con mayor libertad.
Sex and the City también sirvió para estrenar ropa recién salida de la pasarela. En la tele se lanzaban tendencias e imponían prendas. Así sucedió con la baguette de Fendi, por ejemplo, que fue presentada en sociedad en la serie.
De la pasarela a HBO y a esperar los seis meses reglamentarios para que llegaran a la tienda. Nada de fast fashion por aquel entonces. Un caso: el gorrito de lana rosa de Carrie Bradshaw salió del desfile de Missoni Otoño / Invierno 2003. Quedó registrado en el episodio 'Catch 38', cuando la escritora newyorkina pasea con el ruso Petrovsky por Battery Park.
